viernes, 27 de enero de 2017

Mi experiencia.

No estoy bien, eso esta claro. Yo he sufrido lo incontable, estoy sufriendo lo increíble y a día de hoy siguen repitiéndose los sueños y los pensamientos autodestructivos. Pero estoy un poco mejor que aquel día que mi mejor amigo tuvo que acunarme en sus brazos durante horas mientras se calmaba mi crisis de ansiedad, mi llanto y mis gritos. Voy a compartir mi experiencia, la razón por la que estoy así, y si alguien lo lee, y le ayuda a evitar el pasarlo así, o alguien que haya pasado esto le ayuda a sentirse acompañado o menos solo... Solo con eso, habrá merecido la pena este esfuerzo.

Todo eran paranoicas mías. Mi opinión no contaba, lo que yo sentía no valía, porque lo exageraba. Estaba loca. Llegó a llamármelo, literalmente, ''loca''.
Me anulaba, poco a poco, me dañaba, cada día, me iba minando como persona sin yo darme cuenta. Dejé de salir con mis amigos, dejé de hacer mi vida, dejé de viajar, dejé de publicar en las redes, dejé de socializar, dejé de conocer gente nueva, y sobretodo hombres, porque si no podía tener un problema bien grande, y volver a estar loca.
Todo esto fue pasando entre mentiras, entre engaños, falsas promesas, momentos de soledad y de incertidumbre,en los que sabía y sentía que estaba sola y mi amor no era correspondido pero a el le molestaba, le molestaba si se lo contaba. 
Le molestaban ''mis paranoias'', como el decía. Porque no era normal que me pasara el día con mis ''paranoias''. Me llevaba al límite, me hacia explotar y luego la culpa de todo era mía, porque le pedía que parara que me hacía daño y el no hacia nada. La culpa era mía, porque no le caían bien mis amigos, y tenia que dejar de salir con ellos. La culpa era mía, por hacer exactamente lo que el hacia, pero el podía, y yo no.

Con esto lo que quiero deciros, no es que lo odiéis, ni lo critiquéis, lo he querido con locura y aunque el sea un sociópata cuyos sentimientos nunca serán verdaderos por nadie, ya que esa facilidad para olvidar en una noche no la he visto en mi vida, yo siempre le tendré cierto cariño inconsciente porque yo si estaba enamorada. Con esto, lo que quiero deciros es que salgáis de las relaciones así. Que en cuanto os cuenten la primera mentira, salgáis de ahí. Prometerán cambiar, prometerán hacer todo lo posible por arreglarlo incluso lloraran. Y limpiareis sus lágrimas, y los perdonareis y les daréis una nueva oportunidad.
Pero nunca cambian.

Os mentirán cada vez con cosas mas grandes, os harán sentir cada vez mas insignificantes, os irán minando poco a poco hasta que estéis reducidos a ell@s, Y lo que te queda cuando se van, porque si no cedes a sus chantajes, se irán, es soledad, desasosiego, una sensación de inutilidad, de que sin esa persona no vales para absolutamente nada y que tu vida no tiene sentido. Sentirás necesidad de tener a esa persona a tu lado, y si te pasa como a mi, esa persona te hará daño, te dirá cosas horrendas, te insultara, te volverá a llamar loca, si, me dijo directamente ''estás loca'' y ''eres patetica''. Loca y patética por amar. Esa persona te dirá que le molestas que no quiere saber nada de ti después de todo lo que habéis compartido. Y tienes que entender una cosa, y es que esa persona lo que quiere es cambiar de objetivo, a ver si encuentra uno mas maleable.
La culpa no es tuya. Ni mía. Tu has sentido, has sufrido y has luchado. La culpa no es tuya aunque te estés culpando, igual que yo me he culpado. Esa sensación de responsabilidad de lo ocurrido te la generó esa persona, con sus palabras y actos sin que te dieras cuenta, porque siempre todo era a causa de tus actos y palabras; tus ''paranoias''.
Esa persona no te quiso realmente nunca, esa es mi conclusión. Su inteligencia emocional esta reducida al punto de que no es capaz de empatizar, ni de tener en consideración tus sentimientos ni tu sufrimiento. Y así es como funciona una persona que no sabe amar, y lo peor de todo es que son las que mas te enganchan.

Y duele, No te voy a mentir, Duele como si te arrancaran el corazón del pecho, cada noche derramarás lágrimas de amargura echando de menos sus caricias y sus besos y esas palabras tan bonitas que te decía. Cada día iras llorando menos por los recuerdos tan bonitos que tenias y empezaras a hacerlo mas por darte cuenta de que eran mentira. Y a cada putada, insulto, y mala contestación o desplante que te haga esas lágrimas pasaran a ser de desasosiego por sentir que nada era cierto. 
Y llegaras a un punto en que ya no te quedaran lágrimas. Y solo se te volcara el corazón con nauseas y sensacion de mareo cada vez que pienses en ello. En mi caso, cada vez que miro el móvil. Cada vez que se me ocurre darle a ese botoncito lateral de mi móvil se me revuelve el estomago y el corazón de miedo. De autentico pánico. Pánico a que aparezca su nombre en mi pantalla, pánico a ver algo suyo, otro insulto, otro desplante, otro desprecio. Pánico inconsciente, irracional, pero pánico.

Y así pasaras los días sin comer, sin dormir, sin estar bien. Te dirán que todo pasa, te dirán que con el tiempo estarás mejor, pero tu no notas que mejores. Esa persona tampoco te ayudo, con sus insultos y su demostración de que nunca sintió algo por ti. Y tu no quieres escuchar nada de esto solo quieres entender porque es capaz de olvidarte así y de hacer vida sin echarte de menos, si te quería. Pero no lo hacia.
Así que, por experiencia os voy a decir, que si pasa, es muy lento. Va a doler, mucho, y cada día un poquito menos. Llorareis, mas lágrimas de las que podéis contar. Mas lágrimas de las que pensabais que podíais derramar. Os dolerá tanto que pensareis que os vais a morir. No podéis vivir sin esa persona, porque os genero una dependencia emocional, eso hacen los sociopatas que no saben empatizar. Pero sobrevivireis. 
Yo estoy sobreviviendo. 
Recordad que no estáis solos, que perdisteis contacto por culpa de esa persona pero la gente, tus amigos, lo van entender. No te van a dejar caer. Y aunque las noches sean largas, amargas, horrendas y llorosas, siempre podrás sonreír cada vez un poquito mas rodeándote cada tarde, cada día, de personas que te entiendan, que te apoyen, que te hagan reír sobre todas las cosas y sobre todo, que te quieran de verdad. 
Que te quieran sin condiciones.
Sin amenazas.
Sin insultos.
Sin desprecios.
Sin chantajes.
Sin elegir ''X'' o estar conmigo.
Sin hacerte daño.
Quererte, de verdad, al fin y al cabo. Lo que esa persona no te supo dar.


sábado, 31 de diciembre de 2016

Me vas a extrañar

Nunca he estado segura de nada, de eso, estoy segura.
Pero me vas a extrañar, te lo digo y te lo adelanto, para que no digas, porque sobre advertencia no hay engaño. Y si tan solo alguien me hubiera advertido antes de haberte conocido, tal vez todo esto no me hubiera parecido un completo engaño al final del día.

NADIE ME ADVIRTIÓ, NADIE ME HIZO NOTAR QUE MIENTRAS MÁS TE CONOCÍA, MÁS ME PERDÍA.

Nadie me previno, no me avisaron que tus besos eran veneno, de ese que se vuelve un tanto adictivo. Nadie me dijo que enamorabas con partituras y sonrisas, que seducías al encontrar siempre las palabras correctas aún en los momentos no tan indicados, tan correctas, que convertían al momento en el instante perfecto. Nadie me avisó, que a tu lado sería sombra. Que yo, acostumbrada a ser luz, me convertiría en un simple reflejo en medio de tanta oscuridad.

Te di todo, tanto que me desbaraté, tanto que hasta te enalteció la manera en la que yo te miraba, el brillo en mis ojos te iluminó, mi percepción te hizo grande, enorme, un gigante en mi pequeño tablero de este juego llamado vida. Y comenzaste a acomodar las piezas a tu gusto y comodidad, sin saberlo, te convertiste en el amo y dueño de mi mundo. Como buen comandante, lideraste el ejército de mi guerra interna, en donde pensamiento y sentimiento nunca pudieron llegar a un acuerdo de paz.

TE CONFIESO, QUE HASTA LA FECHA, NOMBRO TRAS TU NOMBRE A LA MÁS GRANDE DE LAS BATALLAS JAMÁS PELEADA EN MI INTERIOR.

De pronto, me cansé, me cansé de tratar de demostrarte las mil y un razones de porque nos merecíamos el uno al otro, de porqué nos pertenecíamos. Me cansé de insistirte que entendieras lo que yo veía en ti, y entonces comprendí, que jamás lograría poder encontrarte, si ni siquiera tú mismo sabías en dónde estabas. Y es que más difícil que hallarse a uno mismo, resulta invertir todo lo que tienes y eres en hacer que alguien más se vea con los mimos ojos con los que tu lo ves.

Nunca he estado segura de nada, de eso estoy segura. Pero creo que me vas a extrañar. Vas a extrañar tenerme, tocarme y besarme, vas a extrañar poder verte al espejo y al menos reconocer esa parte de ti que aún me pertenece. Vas a extrañar sentirme, cerca en todo momento, nunca distante en cuerpo ni esencia, vas a extrañar mirarme y encontrarte en mi mirada, vas a extrañar tu fuerza, mi luz, tu bienestar y mi confort. Vas a extrañar mis poesías acompañando a tus melodías y el paso del viento al caminar junto a mí. Vas a extrañarme a cada minuto, a cada segundo, en cada anhelo, sueño y suspiro, al ver cada estrella compartida y caminar por cada rincón recorrido.

VAS A EXTRAÑAR EL ROCE DE MIS MANOS Y LAS COSQUILLAS EN TU PELO, VAS A EXTRAÑAR EL SONIDO DE MI VOZ, PERO SOBRE TODO, VAS A EXTRAÑAR MIS SILENCIOS, ESOS EN LOS QUE SIN DECIR UNA SOLA PALABRA, COMPARTÍAMOS ABSOLUTAMENTE TODO Y NOS PERTENECÍAMOS MUTUAMENTE.

Tal vez no se lo que es amar, pero se lo que es perderte hasta encontrar, y hoy que puedo hallarme, te digo que me resulta imposible encontrarte sin perderme al mismo tiempo. Así que he decidido no encontrarte más, en vez, he decidido que me extrañes.

Vas a extrañarme, te lo advierto, vas a perderme, te lo aviso. Pero la realidad es que nunca he estado segura de nada, y de eso, estoy segura

Texto: Tamara Bernstein

sábado, 12 de noviembre de 2016

Una filosofía

Hay momentos en los que sientes que solo puedes caer. Soportas un golpe, soportas otro, y te preguntas, ¿Cuándo se va a acabar?
Luego te das cuenta que no se va a acabar nunca. La vida es eso, una serie de golpes, La felicidad se basa en la entereza y actitud que tengas tu de encajarlos. Hay que ser positivos en la vida, y si algo se va es porque algo nuevo se queda, por muy dificil que sea de llevar a cabo.
Yo he tenido que afrontar muchas situaciones, ninguna si las comparamos con todo lo que me queda por afrontar, demasiadas si tenemos en cuenta en el tiempo en el que las he tenido que afrontar. Mi ultima esperanza, mi ultimo anhelo fue que la persona que me daba golpes, dejara de darmelos. Le di la libertad de elegir, y eligio seguir dandome golpes, hasta que asesto el último, una puñalada directa en el corazón.
Y yo al principio pense que se me acababa el mundo, luego pensé que no servía de nada seguir en él, si me faltaba lo que me importaba. Luego descubri que estaba teniendo una actitud un poco suicida, y que tenía que frenar con ello, y empece a pensar por que había llegado a esa actitud.
Porque me estanqué en el sufrimiento.
Entonces he empezado a tomarme la vida con otra filosofía, en la que el mundo resbala por mis poros y no dejo que penetre en ninguno. En el que la gente son meros compañeros de viaje que poco a poco se van separando para dejar entrar a otros nuevos. Que cada persona aporta algo a tu vida, bueno o malo y sirve para aprender de ello y no volver a cometer los mismos errores o recordar con cariño aquello que te llenó en su momento.
No me arrepiento de ninguna de las decisiones que he tomado en la vida, porque me han llevado a estar aquí, a ser quien soy a comportarme como me comporto y sonreír todas las veces que sonrío. Si estoy aqui es por un propósito, ¿Cuál? Tengo que encontrarlo, pero mientras tanto no dejaré que el barro me hunda. Gracias a las personas que han estado ahi, aunque solo fuera temporalmente, porque me enriquecisteis como persona.
Gracias a las que os fuisteis dejando un sabor amargo, me habeis hecho madurar ante la vida.
Gracias a las que os fuisteis con una dulce despedida, me demostrasteis que no todo el mundo es malo.
Gracias a los que os reisteis de mi pensando que era ingenua, me demostrasteis que soy mas inteligente y astuta de lo que pensaba.
Gracias al mundo por darme la oportunidad de pertenecer a él (y a la madre que me parió, que tuvo mucho que ver).
La vida merece la pena chicos, siempre podemos sacar algo bueno de todo lo malo y ayudar a los demás, a aquellos que seguramente esten mas jodidos que nosotros, porque aunque a veces nos creamos el ombligo del mundo, no lo somos, somos menos que una mota de polvo en este inmerso multiverso (si, yo creo en la teoria de los infinitos universos) y que aunque algo duela, no es para siempre, y aunque algo nos haga feliz, tambien se acaba.
Asi que disfrutemos de las sonrisas, de los besos de las bromas de las gracias, agradeced todo acto de bondad que ya escasean y dejemos pasar las lagrimas que alivian el dolor que llevamos dentro para dejar aparecer nuevas cosas y nuevos mundos ante nosotros.
Que aunque parezca que no, cuando lloramos vemos el mundo muchísimo más borroso, y a veces un simple abrazo puede iluminarlo todo.

lunes, 3 de octubre de 2016

Hoy he leído esto en twitter, y merece la pena.

No hay respuesta al olvido, así como no hay solución a sentirse asfixiado cuando estás sin refugio. No hay manera de olvidar sin extrañar, así como no existe forma de evitar respirar profundo cuando subes la mirada y recuerdas lo que intentas superar.
No hay tal dilema entre olvidar y recordar, es la perfección de la mente que hace un balanza entre lo bueno y lo malo, y cuando finalmente desistes de recordar será para decidir que pesa más; extrañar lo que te hizo daño y al final del día superar, o recordar lo que te llena de felicidad y al final del día volver a intentar.

miércoles, 27 de julio de 2016

Vive y dejame vivir

Soy una persona insegura. Si, soy insegura. A pesar de que siempre me verás con una sonrisa y palabras de más. Nunca dejaré tiempo entre carcajada y carcajada para que te pienses dos veces si te caigo bien, precisamente por eso, porque soy insegura. Y si no te lo piensas, igual no te das cuenta de lo desastre que soy.
Últimamente hay gente a mi alrededor que se ha dedicado a provecharse de esa inseguridad, de esa incapacidad mía de no ser capaz de llevar una discusión, de mi ausencia física y psicológica por problemas personales para defenderme de ataques de puñal en la espalda. Últimamente han abusado de mi buen humor y mi confianza. Últimamente me han exprimido todas las sonrisas para convertirlas en gritos de odio y desesperación, se han dedicado a hacerme la vida imposible.
Y yo me pregunto, ¿Qué he hecho?
Nada. Esa es la respuesta. Absolutamente nada.
Hace poco una persona muy sabia me dijo que tenia dos filosofías de vida: vive y deja vivir, y no hagas lo que no quieres que te hagan. Esa persona me hizo pensar, que si yo estaba dejando vivir pero a mi no me dejaban tener vida, igual estaba haciendo algo mal. Y me di cuenta de que lo único que hacía mal, es dejar que esas personas que no me dejaban tener vida siguieran metidas en ella.
Y os recomiendo encarecidamente que penséis sobre esa filosofía de vida, esa manera de pensar que te hace vivir sin preocuparte de lo que hacen los demás, vivir sin preocuparte de como vive la gente de tu alrededor, que lo único que te importe sea ser feliz sin ser a costa de la desgracia ajena.

Disfrutemos de la vida, que es muy corta, que en nada se acaba y no queremos darnos cuenta de que la hemos desperdiciado. Disfrutemos de los momentos, de la gente que verdaderamente importa y de nuestros ombligos, y no de la pelusilla del de en frente. Dejemos de guardar rencores y de rallarnos por cosas que al fin y al cabo no son tan importantes, son niñatadas o cosas que tienen únicamente la importancia que tu quieres darle.
Disfrutemos antes de que nos arrepintamos de no haber vivido nuestra vida.

miércoles, 22 de junio de 2016

Me he dado cuenta de muchas cosas.
Me he dado cuenta de que el rencor no lleva a ningun sitio, que las mentiras solo duelen, no existen las piadosas, que las personas decepcionan, aunque no quieras, que siempre esperas algo de alguien por mucho que digas que no y nunca se acerca a la realidad. Me he dado cuenta de que el amor es una mierda, que es muy dificil que no salga mal, que aunque dos personas se quieran se pueden hacer daño, se pueden herir hasta no poder mas y eso realmente no es amor. No se lo que es, es algo enfermizo que te lleva a un bucle de dolor e impotencia por ver a la persona a la que quieres hacerte daño y verla sufrir por tu culpa.
Me he dado cuenta de que el amor practicamente no existe, solo dura unos meses, luego solo tienes cariño o convivencia, y que no todo el mundo es compatible para cargar con una vida en pareja. Me he dado cuenta de que las mariposas en el estomago no son buenas, te estan indicando que te vayas, no que te acerques, sobre todo cuando has sufrido mucho. Me he dado cuenta de que la curiosidad de verdad mató al gato, y que tambien me puede matar a mi. Me he dado cuenta de que todo es valido, cuando realmente no lo es, y que si no cortas por lo sano hay extremos a los que se pueden llegar que no son sanos ni recomendables.
Me he dado cuenta de muchas cosas, demasiadas. Pero de lo que mas me he dado cuenta, es de que querer a una persona no es suficiente. No cuando esa persona es capaz de hacerte daño conscientemente, es capaz de ignorarte sabiendo que estas sufriendo, conscientemente, y es capaz de no reflexionar ni anteponer sus sentimientos positivos a su rencor.
Es dificil. Es muy dificil y eso es lo que estoy intentando expresaros. Que es muy dificil cortar por lo sano, es muy dificil anteponer nuestro propio bienestar al resto sobre todo cuando eres una persona empatica y entregada como yo, y más aun cuando no lo aprecian. Es dificil pero vale más sufrir unos dias por haber perdido algo que perderte a ti mismo dia tras dia.
Y eso es de lo que me he dado cuenta hoy. De que me habia perdido a mi misma. Había dejado de ser yo, había dejado que me cambiaran, que me hicieran ser diferente a lo que normalmente soy, he dejado que me hagan pensar como nunca lo había hecho y no me gusta. Soy diferente, y quiero vivir marcando la diferencia que existe entre yo y el resto del mundo, y no puedo hacerlo cuando tengo personas que me chupan la energía a mi alrededor.
Nunca me gusto tomar decisiones, pero hoy no me ha quedado más cojones que tomar una. Una decisión dolorosa, una decisión que en parte no me gusta, pero se que si no le echo dos ovarios me voy a quedar en la estacada y nunca volveré a ser la misma.
He tomado la decisión de volver a ser feliz.

sábado, 16 de abril de 2016

No te voy a pedir que me des un beso, Ni que me pidas perdón cuando creo que lo has hecho mal o que te has equivocado. Tampoco voy a pedirte que me abraces cuando más lo necesito, o que me invites a cenar el día de nuestro aniversario. No te voy a pedir que me des la mano cuando estemos en mitad de esa ciudad.
No te voy a pedir que me digas lo guapa que voy, aunque sea mentira, ni que me escribas nada bonito. Tampoco te voy a pedir que me llames para contarme qué tal te fue la noche, ni que me digas que me echas de menos. No te voy a pedir que me rías las gracias, ni que hagas el tonto conmigo cuando mis ánimos están por los suelos, y por supuesto, no te pediré que me apoyes en mis decisiones. Tampoco te voy a pedir que me escuches cuando tengo mil historias que contarte.
No te voy a pedir nada, ni siquiera que te quedes a mi lado para siempre.
Porque si tengo que pedírtelo, ya no lo quiero.